ESE INFIERNO TAN TEMIDO
Para cerrar este capítulo dedicado a la la final de la Libertadores, cuyo
resultado es conocido, ahora comienza otra etapa en el club más popular del país,
revalidado plenamente por la movilización histórica que produjo, la cual no midió
ni la distancia, ni la situación económica que vivimos y copo literalmente Rio
de Janeiro.
Es obvio que la derrota dejara en descubierto situaciones, de las cuales el
periodismo se encargara de ventilar, desmenuzando las actuaciones de los
futbolistas o del técnico y el porqué del esquema utilizado y si debía poner a
tal o cual jugador.
Pero seguramente, nadie se va a animar a cuestionar al ídolo máximo del
club, que tampoco pudo eludir la maldición de la Séptima, que tanto se le
endilgo a la gestión anterior, por la falta de resultados internacionales y que
le costo perder la presidencia, a pesar de la comoda situación en lo institucional.
Siempre queda la pregunta porque nunca se menciono la renuncia de Roman en
el vestuario antes de disputar la final del 2012, divulgada por su hermano, con el consentimiento del
futbolista (para a quien le interese, les recomiendo la
nota del 1 de Noviembre del portal infobae), bajo el titulo de:
“La
historia completa de la última final de Libertadores que Boca jugó en Brasil:
la “bomba” de Riquelme y la interna en el vestuario”, en donde se detalla lo
ocurrido y la causa de tal decisión del ídolo máximo del club que decidió que
nunca le iba a dar a su archi enemigo Falcioni, la posibilidad de ese título, a
pesar que como siempre dijo el 10, el Club está por encima de todo.
Todos
los periodistas fanáticos de Riquelme, nunca se van a a animar a hacerlo y los
otros parecen tener demasiado miedo en destapar esta olla que dejaría un tendal
de heridos, por las actitudes de aquel
momento que cuanto menos parecen muy
poco claras.
También
va a comenzar la cacería hacia Cavani, quien vino precedido de una gloria
indiscutible, por su trayectoria casi inmaculada, pero desde que llego, aporto
muy poco, terminando en el partido de ayer lesionado y entre lágrimas.
Lo positivo, es que hasta ahora, no se han conocido incidentes dentro de los que viajaron o aquellos que se quedaron en el pais, lo cual, dado a lo que se preveia, no deja de sorprender gratamente, solo aparecieron las declaraciones de dirigentes de Independiente manifestando su alegria en la derrota y los habituales memes de cargada del resto de las hinchadas.
Boca de por si, como ya es conocido,marca la agenda de todos los los programas y más aun con una derrota de esta envergadura, así que tendrán tela para cortar y veremos cómo influye esta dolorosa realidad en los socios, que votaran a fin de año, y seguirán esperando que se acabe la maldición de esta ansiada Séptima Copa.
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