UNA ARGENTINA FLORECIENTE
Que difícil es todo en este amado país, a veces escribo antes de acostarme, otras a la mañana temprano y siempre la sensación de angustia que me acompaña es recurrenteHoy amanecimos con otro crimen lamentable en una zona casi residencial de
la Ciudad de Buenos Aires, por el robo de un celular a un ingeniero civil de 42
años y si bien esto por desgracia es recurrente por todo lo que ocurre en el
Gran Buenos Aires, donde estos hechos son constantes, dado que ocurrió en el ámbito
de la capital se expandió como un reguero de pólvora.
Esto no es más que otra muestra de cómo vivimos, donde la vida humana no
vale absolutamente nada y es otra familia destrozada, que nunca va a ser la
misma y que pasada la noticia mediática (recordemos el crimen del cirujano ocurrido hace un par de semanas, al
que ya me réferi y del cual nadie dice nada), pues dentro de una semana no se va a hablar más, quedando la congoja solo a sus
allegados.
Por qué estamos así, ya lo sabemos de memoria y démosle el nombre que
queramos, desidia, falta de preocupación, falta de recursos (dicen que no
existen cámaras), otras cosas que preocupan más a nuestros gobernantes y que
nos tienen totalmente indefensos ante cualquier situación extrema.
Yo lo escribí muchas veces, que los que debemos salir todos los días, no
sabemos si vamos a regresar sanos, con la incertidumbre de nuestros familiares que
quedan en nuestro hogar, sin tener noticias concretas de nuestra actividad.
Podría seguir ahondando y buscando definiciones ante lo inexplicable, que
hoy le toca a CABA tratar de encontrarlas y conociendo cómo se maneja todo
seguramente serán insuficientes.
Ya sabemos que aunque aparezca el autor del crimen, su esposa y su pequeño
hijo, nunca recuperaran a un hombre que se encontraba en la flor de la edad y con
un futuro promisorio, que vio tronchada
su vida por el robo de un celular.
POR FAVOR QUE ALGUIEN SE ACUERDE DE NOSOTROS ¡!!!!!
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