LIO LA SELECCIÓN
Y EL MUNDIAL
Otro mundial que nos convoca y como siempre todos los argentinos estaremos
pendientes de lo que nos vaya a suceder, con las esperanzas de siempre,
sufriendo y ojala gozando de lo que estamos deseando desde hace tantos años.
Los mundiales tienen una atracción inigualable, para todos aquellos a los que nos gusta el futbol que de por sí solo, es un tema que genera discusiones en las que casi
nunca nos ponemos de acuerdo, aquí no hay duda que no hay ningún elemento en
contra, ya que todos queremos ver a
nuestra selección alzar la copa.
Por supuesto que hay algo mas, que es muy fuerte y es la figura de Lionel
Messi, ganador de todo con sus clubes, indiscutido en el resto del mundo, pero
con una espina que por suerte pudo sacarse el año pasado: salir campeón con
celeste y blanca (para los que puedan les recomiendo ver la serie Sean Eternos:
Campeones de América) e hizo que los pocos que lo ponían en duda, dejasen de
lado cualquier cuestionamiento y los medios que a menudo lo denostaban pasasen
a ensalzarlo con vehemencia, reconociendo todo lo que siempre dejó con la selección.
Que se puede decir de Lio, una persona con una tremenda humildad, que jamás
se vanaglorió de sus logros, que siempre respetó a sus rivales y nos maravilla continuamente,
con las cosas increíbles que ejecuta dentro de una cancha de futbol. Verlo
levantar la Copa América, fue lo que todos deseábamos y más que nuestra propia alegría
por este logro, fue saber que era lo que le faltaba (y que el mismo expresó), además
que lindo fue el homenaje de sus compañeros, porque todos sin excepción lo
idolatran y comprendían que si era importante para ellos este logro, para Lio
era necesario para coronar una carrera impresionante.
Otro que sufrió enormemente todas estas frustraciones fue Angel Di Maria,
quien fue blanco de silbatinas y hasta de las cargadas de periodistas que lo
tildaron con todos los motes que se les ocurrió y luego del gol del maracaná, paso a ser
Angelito, el nuevo héroe, (por supuesto que se lo merecía), es cierto que el futbol se mueve por estados
de ánimo, según el resultado de los partidos, pero a esta generación les tocó vivir
cuatro finales perdidas y eso fue una mancha que por suerte quedo de lado.
Todos las consideraciones quedaran de lado una vez que Argentina comience
su recorrido en Qatar, allí todos estaremos pendiente de su suerte si se da lo
que queremos, saldremos a festejar (y nos olvidaremos de nuestras frustraciones
diarias), con Lio levantando la copa que será la culminación de una fantástica carrera,
por supuesto nosotros estaremos junto a él,
admirándolo una vez más y seguramente llorando de alegría.
Suerte muchachos
ResponderBorrarLLega la hora de sufrir
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